El embarazo es más evidente físicamente en unas especies que en otras. En el caso de la tortuga, puede ser algo complicado identificar el estado de gestación, pero existen algunas señales que nos dan pistas claras sobre ello. Te damos los detalles.

Abdomen firme y abultado
Es una señal clásica de embarazo, sólo que es un poco difícil detectarla en las tortugas. Para ello debes palpar la zona. La forma correcta de hacerlo es sujetar a la pequeña para que no se mueva y sostener una de sus patas traseras.

Una vez la mantengas en esta posición, introduce un dedo en el lateral del abdomen, que es la zona en la que este reptil almacena los huevos. Si adviertes esta parte dura y abultada, lo más probable es que esté gestando.

Cambios en su comportamiento
El embarazo no sólo provoca cambios físicos en el animal. También le hace actuar de forma diferente. Por ejemplo, puede que excave agujeros en la arena de su terrario, ya que es en ellos donde ubicará sus huevos en el futuro.

Por ello, en esta situación tienes que añadir tierra blanda al terrario. De lo contrario, puede que retenga los huevos en su interior, con lo que dañaría su organismo.

Atención veterinaria
Ante cualquiera de estas señales, debes acudir al veterinario lo antes posible. Él podrá confirmar el embarazo e indicarte los pasos a seguir para cuidar a tu mascota durante este período tan especial. Además, te guiará respecto a las atenciones que deberás proporcionar a las futuras crías.

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