Toda ayuda es poca para las mujeres víctimas de violencia de género. Bajo esta premisa, una veintena de perros han sido entrenados en España.

Así comenzó todo
Hace siete años, una mujer se puso en contacto con Ángel Mariscal, propietario de Security Dogs, una empresa dedicada a adiestrar a canes para seguridad privada. La mujer solicitaba que entrenara a su perro para protegerla de su maltratador. A partir de ese momento, surgió la idea de trabajar la protección con los perros, dejando a un lado su instinto de caza y de defensa.

Perros de protección
Así nació la Fundación Mariscal. Hasta ahora ha entregado más de una veintena de perros a mujeres maltratadas para que las protejan frente a posibles ataques de sus maltratadores. Los perros de protección, conocidos como Pepos, actúan como guardianes de sus guías, disuadiendo al agresor.

Si se produce un intento de ataque por parte del hombre y la mujer se siente amenazada, solo tiene que tirar del arnés de su perro para que este se abalance sobre él y le inmovilice.

En ese momento, la víctima podría huir, llamar a la policía o activar la señal del GPS telemático para alertar de que su maltratador ha quebrantado la orden de alejamiento.

Formación
La Fundación ofrece cursos gratuitos para aprender a manejar a los animales y conseguir crear un vínculo afectivo con ellos. En total son 250 horas de formación para la víctima, que tienen como objetivo que el perro no solo se convierta en su mejor protector, sino también en su mejor amigo.

En el siguiente enlace puedes ver un video que explica cómo trabajan estos perros, además de testimonios de mujeres que se sienten más protegidas gracias a sus canes.

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