Puede que alguna vez hayas oído hablar del PBFD, mucho más conocido como la enfermedad del pico y las plumas en aves. Afecta a la familia de las psitácidas y, tal y como su nombre indica, se manifiesta especialmente a través de su pico y plumas. Te contamos todo lo que debes saber sobre esta afección.

Un circovirus aviar
El PBFD (Psitaccine Beaker and Feather Disease) es una enfermedad vírica que ataca a la familia de las psitácidas (periquitos, loros, papagayos, cotorras, agapornis, etc.). Está presente sobre todo en Europa y Asia, aunque también se ven algunos casos en América.

Esta enfermedad afecta gravemente al pico, piel y plumas de las aves. Ataca a los folículos de las plumas, pico y garras del animal, ocasionando necrosis y malformaciones en estas zonas.

También puede adherirse a sus tejidos internos y lesionar sus órganos. El grado de daño puede ser mayor o menor dependiendo de la especie, la edad y la variedad del virus.

Forma de contagio
El PBFD se contagia fácil y rápidamente, especialmente entre aves domésticas y jóvenes. Se transmite a través del polvo, mediante la inhalación, así como por el contacto con las heces de otros animales infectados. Los comederos, bebederos y juguetes también pueden ser focos de este circuvirus.

Por desgracia, esta enfermedad actualmente no tiene cura, por lo que suele desembocar en la eutanasia. De ahí que sea tan importante la prevención.

Principales síntomas
Los síntomas suelen manifestarse a las tres o cuatro semanas de contagio, e incluyen tanto señales muy visibles como otras más difíciles de reconocer. Respecto a las primeras, un ave infectada con este virus presenta una despigmentación grisácea en el plumaje y crecimiento anómalo de las plumas y el pico.

Cuando la enfermedad está más avanzada, el animal también puede manifestar problemas gastrointestinales que desemboquen en vómitos, diarreas e inapetencia. Sin embargo todas estas señales no son suficientes para diagnosticar esta enfermedad. Para ello el veterinario debe tomar una muestra de sangre y enviarla a un laboratorio especializado en aves.

Cómo prevenir el PBFD
Como decíamos, es una enfermedad sin cura y los escasos casos de supervivencia dejan secuelas de por vida en las aves afectadas. Por ello es tan importante prevenirla, algo que podemos hacer siguiendo ciertas pautas. Por ejemplo, adquirir a los animales sólo a través de sitios de confianza, ofrecerles una alimentación de alta calidad que les proporcione las defensas que necesita y mantener una buena higiene en su entorno.

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