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    La respiración en perros chatos: problemas y soluciones

    4 noviembre, 2016

    Si tu perro tiene el hocico chato seguro que habrás notado que respira de forma peculiar y sobre todo… ¡que no para de roncar! Esto se conoce como síndrome braquicefálico y puede llegar a ser peligroso.

    Qué es
    El síndrome braquicefálico, también llamado síndrome de la obstrucción de las vías respiratorias altas, es un trastorno común en perros chatos como el bóxer, el bulldog o el carlino. Al tener la estructura del hocico más estrecha, el aire tiene menos espacio para acceder a los pulmones.

    Además, su tráquea es más fina y el paladar blando es demasiado largo, lo que agrava problemas respiratorios. Esto provoca que sean propensos a sufrir golpes de calor y enfermedades cardíacas.

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    Cómo reconocerlo
    El síntoma más característico de este trastorno es una respiración excesivamente sonora, con ronquidos y a un ritmo acelerado. En lugares húmedos y calurosos, y después de hacer ejercicio físico, los síntomas se vuelven más graves. En los casos más extremos, pueden llegar a desmayarse.

    Soluciones

    Lo primero que debemos hacer si notamos alguno de estos síntomas, es acudir al veterinario para que lo examine. Lo habitual es realizar un estudio radiográfico del tórax para descartar enfermedades como la neumonía.

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    Afortunadamente, este problema puede solucionarse con una intervención quirúrgica. Esta consiste en recortar el exceso de paladar blando y modificar los orificios nasales con el objetivo de facilitar el paso del aire.

    En el siguiente video puedes ver un ejemplo de los buenos resultados que la cirugía tiene en los pacientes que sufren este síndrome. Otto es un ‘frenchie’ que apenas podía respirar y que ahora se encuentra muy recuperado.

    Cómo prevenirlo
    Al margen de que este problema pueda aparecer por la propia fisonomía del perro, podemos tomar algunas medidas para que no se desarrolle. Por ejemplo, usar arnés en lugar de collar, evitar ambientes húmedos y calurosos, y asegurarnos de que el animal dispone siempre de agua fresca. También es importante que los paseos no sean excesivamente largos para que no haga esfuerzos innecesarios.

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