Algo tan aparentemente sencillo como hacer que tu mascota se tome una pastilla puede convertirse en una auténtica odisea. En el caso de los gatos, muchos de ellos salen huyendo o reaccionan con agresividad ante la simple idea de comer algo que les desagrada. Si reconoces a tu minino en esta frase, no te pierdas nuestros consejos para lograr que se tome su medicación.

Triturar la pastilla
Puede que pienses que triturar la pastilla hasta convertirla en polvo y mezclarla con su comida sea una buena idea. ¿Qué podría salir mal? Algunos gatos aceptan esto sin problemas; sin embargo, otros detectan la presencia de la medicina y se niegan rotundamente a comer.

Lo mismo ocurre si escondes la pastilla en un trozo de comida. El peludo es capaz de detectarla y escupirla. Si pruebas este método y fracasas, será mejor que no lo vuelvas a intentar, ya que puede llegar a rechazar cualquier tipo de alimento.

Tranquilidad ante todo
Si esto ocurre, no tienes más opción que ser tú mismo quien meta la pastilla en la boca del felino. Para ello has de elegir un momento tranquilo, en el que el animal esté relajado, y acercarte a él muy suavemente. Conviene comenzar con una buena sesión de caricias.

Siempre con mucha calma y paciencia, sujeta su cabeza con una mano, elévala ligeramente y mete la pastilla suavemente en su boca. Acaricia su cuello para ayudarle a tragar. Si tu gato es manso, este truco bastará para que tome su medicina.

Inmovilización
Aunque debe ser el último recurso, puede que no te quede otra alternativa que obligarle a tomar su pastilla, por supuesto, sin hacerle ningún tipo de daño. Para ello puedes envolver al animal con una toalla, estirándola sobre una superficie, situando al minino encima y cubriéndolo con ella.

Una vez esté ‘atrapado’, sujeta su cabeza e inclínala suavemente hacia arriba, abre su boca e introduce la pastilla. Será mucho más fácil si te ayuda otra persona. Después, ayúdale a tragar masajeando su cuello y ofreciéndole agua.

Recompensa
Para el animal todo esto puede suponer un gran estrés. Por eso es importante recompensar al pequeño cada vez que tome su medicación. Para ello nada mejor que la comida, los juegos y las caricias. La idea es conseguir que tu gato asocie la hora de la pastilla con algo positivo, de manera que cada vez oponga menos resistencia.

También te puede interesar…

• 

  Mi gato no maúlla: ¿por qué?a

  ¿Qué quieren decirnos con ello? Te explicamos las principales razones.

• 

  Ayuda a tu gato a ser más sociable

  Los gatos suelen ser independientes, pero no por ello tienen por qué ser antisociales.