Por muy comilón que pueda ser nuestro gato, hay situaciones en las que pierde el apetito. Es una señal que no debemos dejar pasar, pues puede ser síntoma de algún problema de salud o de comportamiento. Te explicamos cómo actuar en caso de que tu minino se niegue a comer.

Causas frecuentes
No encontraremos solución al problema si no identificamos su origen, pues el tratamiento dependerá del mismo. Algunas de las causas más habituales de la inapetencia felina son:

1. Bolas intestinales. Los gatos pasan gran parte del día lamiéndose para mantener su cuerpo limpio. Se trata de un método de higiene muy efectivo, pero tiene un inconveniente: el pelo puede quedar adherido a su lengua y acumulado en su estómago. Todo ello puede generar desde estreñimiento hasta náuseas, lo que a su vez ocasiona inapetencia.

2. Cambio de alimentación. Al igual que nosotros, a los gatos les cuesta asimilar los cambios bruscos en su alimentación. Las transiciones de un pienso a otro deben ser paulatinas, de lo contrario, pueden dar lugar a problemas gastrointestinales que lleven al peludo a dejar de comer.

3. Ubicación incorrecta del comedero. El comedero ha de estar situado en un rincón tranquilo de la casa. De no ser así, el animal se sentirá incómodo y probablemente abandone sus hábitos alimenticios.

4. No le gusta la comida. A veces los gatos rechazan la comida porque simplemente no es de su agrado. Prueba con diferentes marcas y modalidades, todas ellas de alta calidad.

5. Cambios en casa. Estos felinos son animales de costumbres y cualquier cambio en su entorno puede llevarles a perder el apetito. Una mudanza, la pérdida de un familiar, una nueva mascota, el nacimiento de un bebé… Todo esto motivado por el estrés y la ansiedad.

6. Enfermedades e intoxicaciones. Aquellas enfermedades relacionadas que afectan al tracto digestivo incluyen la inapetencia como uno de sus principales síntomas. Lo mismo ocurre con el consumo de sustancias tóxicas.

Qué hacer
Dada esta variedad de causas, lo primero que debes hacer ante la pérdida de apetito de tu gato es acudir a un veterinario. Él examinará a tu minino y hará las pruebas que crea convenientes para averiguar si existe algún problema físico que cause esta inapetencia.

Si se descartan los problemas físicos, deberás observar bien la actitud de tu minino para dar con el origen del problema. Lo ideal en este caso sería consultarlo con un etólogo felino que te ayude a identificar el motivo por el cual el animal ha desarrollado este problema con su alimentación.

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