El metabolismo de cada especie funciona de diferente manera; no todos los animales toleran adecuadamente la misma dieta. En el caso del gato, existen determinados alimentos nocivos para su organismo. Si tienes un minino en casa, presta atención a nuestra lista.

Leche
A pesar de la eterna imagen de gatos bebiendo leche que acompaña las películas y los cuentos infantiles, lo cierto es que la mayoría de los mininos no toleran bien la lactosa. En todo caso, pueden tomarla sin lactosa, sólo en ocasiones puntuales y con previa consulta de un veterinario.

Chocolate, té y café
Cualquier alimento que contenga cafeína o teobromina queda terminantemente prohibido para estos felinos. Alteran gravemente su sistema nervioso, dando lugar a trastornos digestivos, úlceras, convulsiones e incluso la muerte. Por tanto, el chocolate, el té y el café deben ser completamente descartados.

Dulces y productos de repostería
La alta cantidad de azúcar y grasa que contienen estos productos puede ocasionar fuertes trastornos intestinales en estos animales, además de enfermedades como la diabetes tipo II. Asimismo, muchos dulces incluyen xilitol, una sustancia muy dañina para su organismo.

Pescado crudo
El pescado crudo puede contener bacterias muy perjudiciales tanto para el ser humano como para el gato. Además, puede reducir el porcentaje de vitamina B1 en su organismo, esencial para su bienestar. A la hora de dar pescado a tu minino, mejor que sea hervido y de manera esporádica.

Atún en lata
Siguiendo con el pescado, debes saber que el atún en lata es nocivo para los gatos debido a su alto contenido en mercurio. Sólo es recomendable en pequeñas dosis.

Algunas frutas
Las uvas y pasas son especialmente venenosas para ellos, ya que dañan gravemente sus riñones. Por otro lado, los cítricos causan diarreas y malestar estomacal. Los aguacates, por su parte, contienen persina, una sustancia muy tóxica para los felinos.

Verduras y hortalizas
Los gatos tienen un tracto intestinal demasiado corto, por lo que no pueden digerir bien la verdura y las hortalizas. Pero hay algunas especialmente tóxicas para ellos, como la cebolla y el ajo, que rompen sus glóbulos rojos y producen anemia hemolítica. El puerro y el cebollino tienen un efecto parecido.

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