Por lo general, los perros son más territoriales que los gatos y estos son más distantes que los canes. Sin embargo, esto no significa que no puedan llevarse bien ni convivir bajo el mismo techo. ¿Quieres saber cómo conseguir que se vuelvan inseparables? ¡Sigue leyendo!

Ten en cuenta su personalidad, no su raza
Los expertos aseguran que la creencia de que hay algunas razas de gatos y perros que se llevan mejor que otras, es totalmente falsa. Lo importante, explican, es tener en cuenta la personalidad de cada mascota y su nivel de energía. Si un gato es asustadizo o miedoso, no será buena idea que conviva con un perro agresivo. Por eso conviene conocer a nuestras mascotas y sus necesidades.

Dale su territorio al gato
Los felinos necesitan tener un espacio que consideren como suyo, lejos del alcance de los perros o cualquier otro animal. Por ejemplo, alguna zona en alto donde el gato pueda campar a sus anchas. Así sabrá que tiene un espacio dedicado solo para él, lo que solventaría problemas de convivencia con los perros.

Libera la energía del perro
Es fundamental que el perro haga ejercicio para que libere energía y al llegar a casa se muestre relajado y tranquilo. Un perro con exceso de energía puede resultar agresivo y difícil de controlar, lo que repercutirá en su relación con otras mascotas.

Entrena a tu perro
Los perros son fácilmente moldeables con algunas técnicas básicas de educación para que controlen sus impulsos cuando estén cerca de los gatos.

Deja que se olfateen
El olfateo es la forma que tienen las mascotas de conocerse. Por eso hay que dejar que se huelan en el momento del encuentro. Pero esta técnica debe empezar antes de conocerse. Hay que dejar que huelan los juguetes de otras mascotas antes de su presentación cara a cara para evitar posibles batallas territoriales.

Planifica el primer encuentro
La mejor forma de que se encuentren por primera vez es con comida de por medio. Lo ideal es que estén en diferentes habitaciones mientras comen. Así olerán al otro junto con la comida y asociarán su presencia a un estímulo positivo.

Socialízalos a la vez
Si es posible, se debe socializar a gatos y perros en edad temprana, ya que será más fácil fomentar una buena relación entre ambos al no haber desarrollado aún un sentimiento de territorialidad y pertenencia. Cuanto antes puedas hacer que se conozcan, mejor, y si ambos llegan a la vez a la casa, perfecto. Así compartirán la emoción de un nuevo hogar y no sentirán que otra mascota invade su territorio.

Separa su comida
Es importante tener separada su zona de comida, para evitar peleas o disputas por los alimentos. Deben entender que tienen comidas diferentes en lugares distintos.

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