A estas alturas del verano, muchos deben dejar atrás sus vacaciones y retomar sus obligaciones. Pero nosotros no somos los únicos que sufrimos esta vuelta a la rutina. A los perros también les afecta, sobre todo a la hora de quedarse solos en casa. Te damos algunas pautas para ayudar a tu peludo a afrontar esta situación.

Ansiedad por separación
Seguramente hayas pasado mucho tiempo junto a tu perro durante las vacaciones. Por ello, aunque previamente se quedara largas horas solo en casa, puede que le cueste acostumbrarse de nuevo.

A esto se le llama ‘ansiedad por separación’. Este término hace referencia al estrés que sufre el animal cuando su dueño se aleja de él, que puede llevarle a llorar, adoptar comportamientos destructivos e incluso a deprimirse.

¿Cómo evitarlo?
Para poder quedarse solo sin problemas, tu perro necesitará una educación previa. Las siguientes pautas forman parte de este adiestramiento:

• Ni saludos ni despedidas. Acariciar o hablar a un perro cuando está nervioso es una mala idea, ya que con ello alimentas ese estado de ansiedad. Es mejor que no hagas caso a las llamadas de atención de tu peludo tanto a la hora de la salida como de la llegada a casa. Así aprenderá que a quitarle importancia a tu partida.

• Desensibilización frente a las señales. Muchos perros comienzan a ponerse nerviosos cuando sus dueños se calzan, cogen las llaves, se ponen la chaqueta… En definitiva, cuando advierten que van a quedarse solos. Un buen truco es hacer estos gestos varias veces al día pero sin salir de casa, para que el animal se acostumbre a ellos y mantenga la calma.

• Largos paseos. El ejercicio es una de las grandes claves. Los expertos aconsejan dar al perro un buen paseo antes de salir de casa para que desgaste su exceso de energía.

• Juguetes especiales. Los avances en el mercado especializado en mascotas cada vez son más destacables. Existen algunos juguetes especialmente diseñados para ayudar a los perros a entretenerse cuando están solos.

Seguridad ante todo
Recuerda que el bienestar de tu mascota es lo más importante. Antes de irte tienes que asegurarte de que no hay nada peligroso a su alcance, como objetos con los que pueda ahogarse, alimentos peligrosos para él o sitios altos donde pueda subir y caerse.

Debes acondicionar un espacio de la casa específico para el pequeño, con una cama donde pueda descansar, agua fresca, juguetes y una buena temperatura.

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