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    Viajar en avión con tu gato: normas y consejos

    18 julio, 2019

    Hace décadas viajar con nuestras mascotas era algo más complicado, pero afortunadamente cada vez más compañías de transporte se unen a la filosofía ‘petfriendly’. En el caso de los aviones, los animales de compañía pueden viajar con una serie de condiciones. Nos centramos en los gatos y las normas y consejos que debemos seguir a la hora de subir con ellos a un avión.

    Elige la aerolínea correcta
    No todas las aerolíneas permiten la entrada de mascotas. Por ello antes de comprar el billete debes conocer bien su política sobre los animales de compañía: el precio, si deben ir en transportín, etc.

    Por supuesto, es muy recomendable que te permitan llevarlo contigo en cabina, pues en la bodega corre grave peligro de sufrir un golpe de calor. Puedes consultar toda esta información en la página web de cada aerolínea.

    Un transportín adecuado
    El minino debe viajar durante horas dentro de un transportín, por lo que es importante que sea cómodo y tenga una buena ventilación. Para ello lo mejor es adquirir un modelo especialmente diseñado para viajes, lo suficientemente mullido y cómodo.

    Todo a mano
    Al igual que ocurre cuando viajas en coche con tu mascota, en esta ocasión también tienes que llevar algunas cosas a mano. Por ejemplo, algo de comida, un spray de feromonas, una manta fina y, en caso de que el animal la necesite, medicación.

    Su propio pasaporte
    Para viajar en avión, el gato necesitará su propio pasaporte. Para conseguirlo sólo tienes que pedirlo en tu clínica veterinaria. El mismo debe recoger su historial médico del animal, su nombre, el del propietario y los datos de contacto, entre otra información.

    Papeles necesarios
    La documentación requerida puede variar dependiendo del país al que vayamos a viajar. Por ello lo mejor es que te informes previamente llamando a la embajada del lugar donde vayas a viajar para asegurarte de llevar todos los papeles que demande la ley.

    Arnés y correa
    Puede que en algún momento tengas que sacar a tu pequeño del transportín, por lo que es conveniente que lleve puesto un arnés y una correa. De esa manera podrás controlarlo mejor y evitar que se escape.

    Relax
    El avión puede resultar realmente estresante para tu gato. Si tu pequeño es muy nervioso, consulta con el veterinario la posibilidad de darle una pastilla para dormir y el uso de feromonas para relajarle. También es importante que el veterinario revise su estado de salud y compruebe que puede viajar sin problemas.

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