En varias ocasiones hemos analizado la manera que tienen los gatos de comunicarse con nosotros. Esta vez, tratamos el asunto desde la perspectiva contraria; es decir, cuál es la forma correcta en la que debes comunicarte con tu gato, pues no todo vale a la hora de ‘conversar’ con él. Te enseñamos a hablar con tu mascota al estilo felino.

No grites jamás
Los gatos odian los ruidos fuertes, por lo que gritar es lo peor que puedes hacer. Usa un tono bajo y una voz suave siempre que hables con él, pues de lo contrario no sólo le resultará desagradable, sino que también puede rechazar tu compañía.

Tono firme para regañar
Si bien nunca debes gritarle, es importante que el minino aprenda a identificar cuándo le estás regañando. Para ello debes usar un tono firme y serio, algo más fuerte de lo habitual, y utilizar palabras cortas como ‘no’ o ‘quieto’. La constancia hará que con el tiempo tu minino comprenda que esa forma de hablarle es en realidad una reprimenda.

Lenguaje corporal
Tu lenguaje corporal ha de ir acorde con tus palabras. Nunca realices movimientos bruscos cerca del animal, ya que podría asustarse. Para hablar con él tendrás que mantenerte a su altura, moverte despacio y con naturalidad, y nunca acariciarle sin que se lo espere.

Utiliza el ‘miau’
No dudes en usar su ‘idioma’ cada vez que quieras, especialmente a la hora de llamar su atención. Los gatos responden casi siempre a los sonidos agudos y largos similares a sus maullidos. Puedes, por ejemplo, llamarle para darle la comida con unos cuantos ‘miaus’ o invitarle a que se siente a tu lado de la misma manera.

Habla con él a diario
Se trata de un consejo muy sencillo pero que no siempre llevamos a cabo. Los gatos son animales silenciosos; de hecho, les gusta el silencio. Pero también necesitan recibir nuestro cariño a través de las palabras, por lo que hablar con tu minino a diario te ayudará a fortalecer vuestra relación.

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