Si te has decidido a tener un acuario en casa, ya has dado el primer paso. Ahora debes responder a la pregunta del millón: ¿de agua dulce o de agua salada? Te ayudamos a hacer la mejor elección:

Acuarios de agua dulce
Su principal ventaja es el bajo coste con respecto a los de agua salada. Un acuario de 60 litros oscila entre los 60 y los 100 euros. Además, con un filtro y una pantalla de 36w será más que suficiente para iniciarnos en este mundo.

Los peces de agua dulce se reproducen fácilmente y no requieren un gasto excesivo. Podemos tener varios guppys y plantas por 15 euros. El coste de luz es asumible y no es necesario realizar test de control del agua.

Acuario de agua salada
Se trata de un acuario más costoso de mantener, puesto que necesitaremos como mínimo un acuario de 90 litros que ronda los 180 euros. La roca viva hace de filtro biológico en este tipo de acuarios y su precio está en torno a los 20 euros el kilo.

Este acuario demanda una iluminación potente, un skimmer y por supuesto, la sal para crear el agua. Los peces más típicos, como el pez payaso o el cirujano azul, son mucho más caros, rondan los 50 euros y no se reproducen con facilidad.

Conclusiones
Si eres principiante y no sabes por cuál decantarte, te recomendamos que elijas el acuario de agua dulce. Su bajo precio y su fácil mantenimiento lo convierte en ideal para aquellos que quieran introducirse en este mundo.

Si ya eres un experto en la materia o, simplemente, estás dispuesto a asumir el gasto de mantener este acuario en las mejores condiciones, elige el de agua salada. La belleza de sus peces y corales es inigualable.

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