Hace apenas unas semanas que saltaba a los medios una noticia revolucionaria para el campo de la ciencia y la etología. Por primera vez en la historia, un equipo de investigadores ha logrado grabar la frecuencia cardíaca de una ballena azul, y el resultado es sorprendente. ¿Quieres saber más sobre este asombroso descubrimiento? ¡Sigue leyendo!

Misión (casi) imposible
Este estudio ha sido llevado a cabo por un equipo de la Universidad de Standford, liderado por el biólogo de la Estación Marina de Hopkins J.A. Goldbogen. Estos profesionales reconocen que no fue nada fácil, pues para ello debían adherir un dispositivo especial con sensores cerca del corazón del animal para medir sus latidos.

Esto supuso todo un reto, pues no es fácil acceder a la parte inferior de una ballena. Además, su piel en esta zona se mueve continuamente, lo que podía hacer que el dispositivo se cayera. Pero a pesar de todo, el coautor del artículo y recién licenciado en la prestigiosa universidad Goldbogen Lab, David Cade, lo logró en un primer intento.

De esta forma el dispositivo quedó adherido cerca de la aleta y los científicos pudieron grabar la frecuencia cardíaca del cetáceo durante casi 9 horas. Con ello han logrado hacer historia, pues es la primera vez que tiene lugar este acontecimiento.

Un corazón al límite
Los resultados son de lo más sorprendentes. Al parecer el corazón de la ballena late únicamente dos veces por minuto, pero esta frecuencia no se mantiene constante. Comprobaron cómo aumentaba a 2,5 cuando buscaba alimento en el fondo marino, y alcanzaba de 25 a 37 latidos por minuto cuando salía a la superficie.

La conclusión que obtienen los científicos es que el corazón de este animal trabaja al límite. Según ellos, esto explicaría que las ballenas no puedan evolucionar para ser aún más grandes.

Este equipo de profesionales promete añadir más funciones a su dispositivo para estudiar más en profundidad el corazón de este mamífero. Asimismo, pretenden analizar el ritmo cardíaco de otras especies de ballenas, como las rorcuales, las jorobadas y las minke.

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