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    Guía para cuidar a un perro anciano

    5 enero, 2018

    Queramos o no, nuestros peludos también se hacen mayores. Al cumplir una edad avanzada necesitan algunos cuidados específicos para mantener su salud al cien por cien. ¿Quieres saber cuáles?

    Se considera que un perro alcanza la vejez cuando supera los diez años de edad. En ese momento comienza una etapa especial que no tiene por qué restar calidad de vida al animal, pero requiere una mayor atención por nuestra parte.

    Alimentación
    Lo ideal es un pienso diseñado concretamente para ejemplares de su edad, rico en proteínas y vitaminas; lo mejor es que consultemos qué marca es la más conveniente con el veterinario. Es importante que sea bajo en grasas para prevenir la obesidad y que el animal disponga de agua fresca en todo momento para mantenerse hidratado.

    Higiene
    Al igual que ocurre con perros de cualquier edad, los ancianos necesitan baños frecuentes (cada mes y medio o dos meses), cepillados diarios y limpieza habitual de la zona de los ojos. Hay que intensificar la higiene bucodental, porque con el paso de los años estos animales son más propensos a sufrir enfermedades periodontales.

    Ejercicio
    Un can anciano no tiene por qué renunciar a su actividad física diaria, aunque debemos reducir su tiempo si advertimos señales de fatiga. Tres paseos al día de 10 o 15 minutos será suficiente para fortalecer sus articulaciones y prevenir problemas como la artritis o las enfermedades cardiovasculares.

    Revisiones veterinarias
    Siempre son fundamentales, pero las revisiones veterinarias cobran mayor importancia durante la vejez. No olvidemos que durante esta fase aumentan los riesgos de padecer algunos trastornos en la salud de nuestra mascota. Los chequeos geriátricos son esenciales para prevenirlos y tratarlos a tiempo.

    Juego y cariño
    El perro ha de activar su mente mediante juegos y otras técnicas. Podemos practicar las órdenes de adiestramiento básicas e incluso enseñarle trucos nuevos. Y por supuesto, tiene que disfrutar de buenas dosis de cariño por parte de los suyos, además de proporcionarle una mayor tranquilidad y respetar sus horas de sueño.

    Como puedes ver, lograr que nuestro pequeño sea feliz durante este período no es difícil si seguimos estos sencillos consejos. Valdrá la pena dedicar todo el tiempo y esfuerzo posible al bienestar de nuestro tesoro de cuatro patas.

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