El agapornis es uno de los pájaros más bellos del planeta y poco a poco se está convirtiendo en una mascota de moda. Pero antes de meter a uno de estos pequeños en tu casa debes conocer bien sus cuidados y, en definitiva, cómo es la convivencia con él. Te hablamos de sus pros y sus contras.

Cariñoso y leal
Aunque estas palabras puedan definir perfectamente el carácter de un perro, lo cierto es que también son características propias de este pájaro. El agapornis siente un gran apego por los suyos, por lo que si acoges a uno de estos pequeños en tu hogar debes saber que siempre va a buscar tu compañía.

De hecho, los agapornis a menudo reclaman mimos de sus dueños acurrucándose a su lado, picoteando su cabeza o tirando de su pelo. No obstante, para ello necesitan un período de adaptación y ganar confianza.

Libertad
El agapornis adora la libertad. No sólo debe disponer de una jaula o voladera muy amplia, también necesita volar por otros espacios más grandes. Puedes dejar que vuele dentro de casa, siempre y cuando sea en un entorno controlado y las ventanas y puertas al exterior estén cerradas.

Diurno
Para sentirse bien física y mentalmente esta ave debe tomar el sol a diario. Por ello es fundamental ubicar su voladera en un patio o jardín, y si no es posible, junto a la ventana.

Enamoradizo
Este pequeño no tiene fama de ser ‘el pájaro del amor’ por cualquier cosa. Necesita una pareja, pues tiene un gran instinto reproductor y sin ella se siente incompleto. Presentan una actitud muy cariñosa entre machos y hembras, y si uno de ellos falleciera, habría que sustituirlo por un ejemplar parecido, ya que su pareja sufriría mucho su ausencia.

Antisocial
A pesar de ser afectuoso y sociable con los suyos, el agapornis puede llegar a ser tremendamente agresivo con otras especies. Simplemente, no pueden convivir en un mismo espacio. De hecho, en ocasiones tienen lugar fuertes peleas entre machos de agapornis, dado que son animales muy territoriales.

Limpieza diaria
Aunque el agapornis es la mascota perfecta en muchos sentidos, también requiere bastante trabajo. En concreto, mantener una buena higiene es algo complicado, por lo que hay que limpiar su jaula y utensilios a diario.

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